Críticas a la Teoría del Capital Humano

 Críticas a la Teoría del Capital Humano

 A veces cuando se realizan análisis teóricos, de un campo determinado se busca demostrar los aspectos acertados y su influencia en la explicación de hechos y circunstancias del ámbito intervenido. La teoría del capital humano, así como ha aportado un enfoque distinto al ámbito macroeconómico laboral, donde determina la relación del conocimiento y del salario, ha sido también objeto de críticas, que tratan de evaluar los principios filosóficos que llevan a observar al trabajador como un elemento productivo o recurso de valor desde la preparación profesional.

Las críticas proceden de sus  planteamientos, que obvian:

1.    Características distintos de capacidad entre individuos,

2.    El contrato psicológico del trabajador,

3.    Las expectativas motivacionales y

4.    Otros aspectos de la naturaleza humana que pueden presentarse en el ámbito organizacional con su cultura y clima que llevan a comportamientos diferentes. Así, como a variables presentes en el mercado de trabajo, con la relación oferta y demanda de puestos de trabajo

 

Otra crítica, es que en esta teoría es difícil establecer una relación causal entre la educación y el salario, hipotéticamente, el determinar que si se estudia más, se va a ganar más, es difícil de medir la relación de estas variables científicamente.

En el caso del modelo de competencias, que plantea característica de aptitud del trabajador,  lleva a diferenciar de la teoría del capital humano, que la productividad es parte del puesto de trabajo y no generada por el trabajador. En este caso los trabajadores con sus aptitudes, destrezas, habilidades y rasgos moldean el puesto de trabajo, el cual existe en la empresa, conectado con otros procesos; administrativos, contables, económicos y técnicos que llevan a la mejora de la productividad.

El modelo de competencia es una alternativa que surge desde la transformación macroeconómica por  la globalización y surgimiento de nuevos mercados. En los años setenta David McClelland enfatizo que la medición de conocimientos, aptitudes y  la escolaridad son impredecibles para un desempeño exitoso en el contexto laboral.

Es así, como al plantear la teoría de Capital Humano para efectos de crecimiento social y económico, se puede inferir que aporta sugerencias objetivas para el campo laboral, desde los procesos de educación y formación, que permiten mantener atención en los niveles de preparación institucional de la masa trabajadora profesional de un país. Vista desde la formación general, aquella recibida en la universidad o institución educativa, atiende desde la importancia del valor educativo para el crecimiento del país y la empresa, un contexto social que aprovecha un caudal de conocimientos, cargados de nuevas tendencias y pensamientos que serán colocadas al servicio de un sistema productivo. En esta misma línea, la formación específica lleva al trabajador preparado a nuevas experiencias de aprendizajes, con el fin de tener mejor de vida. Esa formación específica pertenece a la empresa que da la formación. Los trabajadores no formados, están lejos de ser aceptados por la teoría del capital humano, ya que no poseen niveles de escolaridad, de esta manera se cierra el proceso de inversión.. En el campo de los profesionales, se pueden dividir también en dos; aquellos que dejan los estudios y los que prosiguen los estudios, adicionado más valor a sus desempeño y con ello se asume mayor salario y productividad empresarial. Son  justo estas variables críticas que abren otras posibilidades para analizar a los trabajadores en su totalidad, profesionales y no profesionales


Comentarios

Entradas populares de este blog

La Calidad del Trabajo. La inversión en Capital Humano

La Gestión de Grupos y el Talento Humano